¿Por qué desde hace unos años se está
cuestionando constantemente el ser del Estado Español?, ¿por qué el concepto de
España es tan discutido y discutible?, ¿por qué son tantos los que cuestionan
nuestra grandeza como nación, cuando tenemos una historia más grande y más
decente que la de cualquier otro país del mundo?, ¿por qué ese pudor a la hora
de hablar bien de España, de hacer patente nuestras raíces, de pasear nuestra
bandera sin complejos?, ¿por qué ese odio en algunas regiones de España a todo
esto, cuando hemos sido generosos y respetuosos con todos ellos?, ¿por qué la gran
mentira de la Leyenda Negra sigue más vigente en las mentes de los españoles
que en las de cualquier otro ser humano?, ¿por qué un país que hasta hace pocos
años era envidiado y respetado por todas las democracias del mundo, por el
ejemplo de madurez que dio en la Transición, es ahora ninguneado por cualquier
mindundi?
Si cogemos perspectiva,
es cierto que algunos de esos males estaban larvados: Leyenda Negra, complejo
de España, por la utilización excesiva del concepto en época de la dictadura. Desconocimiento
y/o manipulación de la verdadera Historia de España, fruto de intereses bastados
de los que están sembrados los programas educativos. Pero de un tiempo a esta
parte todos estos elementos latentes, sumados a otros están haciendo eclosión
ante la sorpresa y estupor de los españoles. Es como si se hubiera estado
cebando una bomba que ahora, de repente, nos estalla en las narices.
La razón se me
antoja clara. En España, una parte importante del arco político solo tiene futuro
en la medida en que el concepto de España se diluya en lo que a cada uno les
interese: los nacionalistas en sus utopías supremacistas y los de podemitas en su revolución
totalitario-bolivariana. Si así fuera no habría mayor problema, así los tenemos
desde el comienzo de la democracia. Pero con la llegada de Zapatero todo cambia.
El PSOE se pasó al otro bando
No sé si os acordáis,
pero lo primero que hizo Zapatero al llegar al poder fue derogar el Plan
Hidrológico nacional, Este Plan fue a probado por unanimidad, y se configuraba
como el mayor elemento de vertebración de la Nación. Ese fue el “santo y seña”
de todo su mandato. A partir de ese momento todo lo que hizo este señor estaba
orientado a la rotura de España.
El Estatuto de
Cataluña, origen de lo que hoy tenemos. Ley de Memoria Histórica, un pretexto
para desenterrar el odio que nos llevó en el 36 a una guerra civil, aprovechando
el desconocimiento que sobre lo que ocurrió en aquellos días tiene la mayoría
de los que hablan de ello. España concepto discutido y discutible. Federalismo
asimétrico. Negación de la crisis económica hasta la casi intervención, etc.
Bien es cierto que
cuando España le dio la mayoría absoluta a Rajoy, por estas cosas y otras
parecidas, no hizo absolutamente nada para corregir esa deriva. Para mí este es
el enigma asombroso de todo el periodo democrático. Un hombre que tenía mayoría
absoluta en el Congreso y el Senado, con el PSOE en descomposición y no mueve
un dedo por corregir las políticas “zapateriles” que le llevaron al poder, ahondando
aún más en el deterioro del Estado.
Y para colmo rematamos
con Pedro Sánchez, rodeado, empezando por el mismo, de un gabinete de ineptos,
corruptos, defraudadores, exhibiendo los atributos de la peor burguesía, que
ellos dicen rechazar. Entregados al separatismo que les llevó al poder. Un
grupo de Inútiles que por un titular progre, son capaces de cargarse la
industria del automóvil, que da empleo a 3 millones de trabajadores; o
introducir el desasosiego en todo aquel que tenga un vehículo con el cuento del
“coche eléctrico”. Todo con tal que los memos que nos gobiernan sigan con su
campaña electoral de pijos-progres.
Pero mientras,
España en la cuneta, por las miserias de la peor casta política de la reciente
Historia de España. Políticos pancistas, solo interesados en seguir devengando
trienios en sus poltronas, mientras que a la Nación y al Pueblo que dicen
representar los tienen en almoneda.
Es decir, todo esto
que nos pasa, es consecuencia del deterioro permanente que ha sufrido la política
nacional, en los últimos 14 años. Pero sobre todo por la renuncia manifiesta de
estos gobiernos a la defensa del Estado y sus instituciones.
Claro que, sería
bueno pensar, que parte de todo esto es también
de nuestra responsabilidad y obrar en consecuencia.