Hace más de seis meses que tomasteis posesión como Presidenta de la Región, tú y tu gobierno. Durante meses os habéis quejado mucho de la herencia recibida, lo cual me parece lógico. Lo que no me lo parece tanto es que ese sea el estribillo de todos vuestras intervenciones, sea cual sea el tema a tratar; como si no fueseis capaces de hacer otra cosa que quejaros, cosa que seguro que no es cierto, pero que quieres que te diga esa es la impresión que dais.
Me preocupa más la ausencia de ideas, de proyectos, de objetivos, de imaginación para ilusionar a la gente de esta región sacudida, si cabe, con mayor rigor que otras, por la marea que arrastra a la nave del Estado. Solo he visto en tus consejeros su interés por cubrir las necesidades de llenar los espacios de los medios de comunicación, aunque sea a costa de visitarse unos a otros o con los alcaldes de la casa.
No he visto impulso de gobierno desde tu presidencia, dando la impresión de que sigues delegando las cosas de Castilla la Mancha en los que te rodean. Eso estaría bien si las personas que te rodearan fueran políticos con iniciativa, pero quizá no sepas que los que te rodean, al menos los que conozco, han llegado a ese lugar precisamente por nadar y guardar la ropa, parapetándose de cualquier compromiso que no sea su supervivencia. Cosa que no les reprocho, estando en un partido que se caracteriza por lo “bien que trata” a las personas que se comprometen con él.
Pero sea cual sea la razón, esas personas no están acostumbradas a tomar decisiones que impliquen un mínimo riesgo de desgaste personal. Y no las tomarán si no tienen el impulso y el compromiso de la presidencia. Porque tontos no son, la prueba la tienes en que los principales pilares de tu proyecto en Castilla la Mancha ya se han quitado de la “primera línea de fuego”. De tal manera que si la presidencia delega y el segundo escalón se parapeta, no es difícil entender que todo se pare o vaya muy lentamente.
Me preocupa la falta de empatía con los problemas de la gente, las pocas decisiones que habéis tomado, sobre todo las que tienen que ver con no pagar, han venido aderezadas de prepotencia y en casos de chulería. Oí decir a uno de los afectados: “no me duele tanto lo que han hecho, como la manera como lo han hecho”. Todo un paradigma de la situación creada por quien no tiene la mínima sensibilidad en el ejercicio de sus responsabilidades. Y es que hemos ganado unas elecciones, pero ese es solo el primer paso de una larga carrera donde deberemos aprobar un sinfín de asignaturas, que no solo tienen que ver con la eficacia en la gestión, sino con la calidad humana de los que gobiernan.
Habéis perdido todo el contacto con la calle. En el año 95 en esta región ganamos casi todo: ayuntamientos, diputaciones, la Caja, etc. Cuatro años después lo habíamos perdido todo, solo en Toledo aguantamos con al Ayuntamiento de la capital y la Diputación. ¿Sabes por qué lo perdimos todo? Por el “atracón de moqueta” que nos dimos. Nos creímos los mejores del mundo y como tal nos metimos a resolver problemas en nuestros despachos, y nos olvidamos de los problemas de la gente, solo aquellos que lo vieron claro se mantuvieron. No te engañes a ti te ha dado Zapatero lo que a nosotros en aquellas fechas nos dio Roldán. Sería bueno no cometer los mismos errores.
Otro aspecto que me preocupa es tu presencia en la Región. Cuando estabas en la oposición, los socialistas se ponían de los nervios cuando aparecías en las televisiones, dando ruedas de prensa sobre temas de carácter nacional, rodeada de las personas más importantes del partido. Ahora, se frotan las manos cada vez que apareces dando ruedas de prensa en Génova o en reuniones con los ministros de nuestro gobierno. En aquellas ocasiones reforzabas la imagen de política de alto nivel. Ahora que los castellano-manchegos te han hecho ser “su” política más importante, la imagen que estás dando es de distancia y de que te interesa más lo que se pueda cocer en Madrid que lo que se cuece en Castilla la Mancha. No entro en si es o no cierto, pero esa es la imagen que se trasmite.
Hasta ahora tenemos la suerte de que el PSOE anda “sin cabeza”, pero el día que se organicen y pongan en marcha la máquina de “picar carne”, todas estas impresiones empezarán a tomar carta de naturaleza. Tenemos que tomar la calle y hacernos cómplices de los ciudadanos, para que estén avisados cuando la demagogia socialista se ponga en marcha. Tenemos que arriesgar e ilusionar con nuevos proyectos, con nuevos objetivos que desbanquen los falaces discursos de la izquierda. Solo si damos esa batalla podremos sentar plaza en Castilla la Mancha, si no seremos aves de paso.
Sé que a esta carta se la podrán dar un sinnúmero de intenciones. Me importa muy poco, solo la escribo con el ánimo de decirte lo que creo que debes saber, y que ninguno de los que te rodean te dirán. Alguna experiencia tengo acumulada de la política de esta región y sería desleal por mi parte no ponerla a tu servicio.
Recibe un afectuoso saludo.